EL CUERPO DE CRISTO, Bea LEMA
Esta obra plástica está magistralmente diseñada y, usando el símil de la costura y el bordado, tareas asociadas tradicionalmente al ámbito femenino, confecciona su trama con Vera, hija-cuidadora de su madre Adela como narradora en primera persona de una situación compleja en la que su entorno y los varones de la familia: marido e hijo primogénitos manifiestan evidente incomprensión hacia la misma. Asimismo, se critica el sistema de salud (doctores incluidos) como un organismo inoperante, fracasado y de gestión negligente.
Destaca esta obra por el predominio de la imagen, su poco texto (lo estrictamente necesario), el uso del color y de las técnicas gráficas la cuales transmiten de forma nítida un mensaje de valentía, de superación y de optimismo. Además, nos retrotrae a aquella época en la que la lectura nos era un misterio y contemplando imágenes creábamos nuestra historia (en este caso certera debido a la destreza de la autora).
En resumen, esta novela gráfica es sublime, bella tanto en su contenido como en su forma (estética) que transmite un mensaje de aliento; porque detrás de las nubes está el sol.
Mº Cruz Fernández