Un juego peligroso, Mari Jungstedt
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La escritora sueca Mari Jungstedt en su novela policíaca Un juego peligroso (Editorial Maeva, Madrid, 2015, págs. 334) presenta un doble asesinato de personas implicadas en el mundo de la moda: el fotógrafo Markus Sandberg y Robert Erk, el presidente de la agencia de moda "Life for fashion". En consecuencia, el juego de palabras es fácil: "life for die".
También presenta una convincente denuncia social sobre este sector al cual se relaciona con situaciones atroces como la anorexia (representada por la adolescente Agnes), el estrupo y el abuso sexual (en la figura de Markus), la infidelidad y el abuso de poder (con Robert Erk), el coste sanitario (en Per Hermansson) y otras patías asociadas (en la figura de Katarina).
A este elenco de personajes se aúnan los ya clásicos de esta autora y sus novelas: el inspector A. Knutas y su esposa Line, su compañera Karin Johansson y su hija Hanna dada en adopción. Con esta situación se denuncian los embarazos en adolescentes y la alta conflictividad social de Estocolmo (los más desfavorecidos tales como mujeres maltratadas, homosexuales perseguidos en sus países de origen por su inclinación sexual, indigentes, sufridores del tráfico de personas...)
La deixis espacial y temporal es bien conocida por los seguidores de esta autora: la isla de Gibsy, Gotland, Suecia actual.
Su vivo estilo está formado por descripciones y diálogos, por pensamientos y emociones expuestas gracias a una narradora omnisciente, alternando un sintaxis y vocabulario básico con tecnicismo del ámbito sanitario y del estilismo. Su estructura no se organiza entorno a capítulos sino en fragmentos de varias hojas cual cuartillas unidas para conformar un libro que facilita su lectura y atrapan el interés del lector.
Resumiendo, una novela que interesa al lector quien empatiza con unos personajes, rechaza a otros, reflexiona sobre diversos aspectos de la sociedad occidental mientas lee con avidez hasta el fin de esta trama argumental.
Mª Cruz Fernández